Desde las seis de la mañana del día de ayer, los pescadores artesanales agrupados en la Asociación de Pescadores Artesanales Embarcados y No Embarcados de Puerto Malabrigo tomaron el muelle del mismo nombre, impidiendo el ingreso de trabajadores y el embarque de harina hacia los mercados externos. Ellos exigen la instalación de una mesa de diálogo para tratar la problemática existente su gremio y las empresas que se dedican a la pesca industrial agrupadas en la Asociación de Productores de Harina y Aceite del Puerto Malabrigo (Aprochicama).Argumentando la contaminación de la bahía de Malabrigo, la falta de apoyo al pescador artesanal y el comportamiento irrespetuoso de los funcionarios de APROCHICAMA al no contestar dos documentos en los que solicitaban reuniones de coordinación, los pescadores artesanales tomaron la medida de fuerza indefinida según un acta firmada entre las autoridades y el gremio de pescadores. El alcalde y el gobernador del distrito de Rázuri, José Luis Cumplido Arriaga, y Carlos Alayo Díaz respectivamente, respaldaron la medida de fuerza.
“El pescador artesanal es la persona más perjudicada cuando las empresas harineras producen porque contaminan el mar, y no encontramos algún tipo de ayuda. Los señores de APROCHICAMA nunca cumplen las actas de compromiso. Queremos terminar este abuso que viene desde hace muchos años a través de un diálogo serio con los representantes de APROCHICAMA”, sostuvo Víctor Alcántara Pereyra, presidente de la asociación de pescadores artesanales, quien estimó que esta situación perjudica a más de 200 cabezas de familia que se dedican a la pesca en forma artesanal.
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